martes, 3 de junio de 2008

SALVADOR LANGARICA CABRERA

Compañero, Amigo y Maestro.
1924-1989

Nació en Amatlán de Cañas Nayarit, el 18 de Noviembre de 1924 y murió en la Ciudad de Tepic a la edad de 65 años. Sus padres fueron los señores Salvador Langarica Villarreal y Antonia Cabrera Ocampo. Su familia provenía del estado de Jalisco y su abuelo materno fue Don Epigmenio Cabrera, prominente minero-hacendado de Guachinango, Jalisco. Comentaba de su infancia y adolescencia, gratos recuerdos vividos en los pueblos mágicos de la hermosa y abrupta región del Rio Ameca, como: Amatlán de Cañas, La Estancia de los López., Barranca del Oro, del estado de Nayarit y Guachinango, Zacatongo y Atenguillo, del estado de Jalisco.
Obtuvo el certificado de educación primaria en junio de 1942 y fue alumno del Seminario Diocesano de Tepic de donde fue enviado al Seminario Pontificio de Montezuma, Nuevo México, USA, estudios que no concluyó, porque, sus inquietudes de conciencia fueron más fuertes que su vocación clerical.

Se inició como improvisado Profesor Rural Federal, como se hacía en esos tiempos, con tan solo estudios de primaria y sin más preparación pedagógica que la adquirida a través de la emulación del que y como lo hacían sus mentores de educación primaria y con el tiempo, desarrolló el cuanto y por que, en los Centros de Cooperación Pedagógica, que los mentores organizaban para intercambiar sus experiencias y superarse. Fue un sobresaliente maestro-alumno del H. Instituto Federal de Capacitación del Magisterio, donde cursó sus estudios secundarios y logró el Titulo de Profesor de Educación Primaria por Unanimidad y Mención Honorífica. Fue integrante de la primera generación de Profesores Técnicos en la Enseñanza de la Escuela Normal Superior de Nayarit, y fue el primer Presidente de la Sociedad de Alumnos de la ENSN. Se tituló aprobado por unanimidad y con Mención Honorífica. Como autodidácta desarrolló un vasto conocimiento en las Ciencias de la Educación, el cual socializó en infinidad de Foros de Actualización y Superación Profesional de sus compañeros maestros.

En 1944, se le otorgó nombramiento de Mtro. "C" de Primaria Rural
adscrito a la escuela primaria rural de Mojarritas, municipio de Santiago Ixcuintla. En esta región trabajó en las comunidades de El Pozole y El Botadero, pero su actividad se dejó sentir en todo el municipio, fundando once escuelas primarias y coparticipando en la creación de tres escuelas secundarias por cooperación. Fue miembro del Ensayo Piloto promovido por la UNESCO. De 1964 hasta su fallecimiento en 1989, fue Inspector Escolar en la Décima Zona Escolar, nombramiento alternado con el de Jefe de Sector de Zonas Escolares.

En la Escuela Normal Superior de Nayarit, desde su fundación, fue un brillante alumno, Primer Presidente de la Sociedad de Alumnos, reconocido maestro, destacado coordinador de la especialidad de Pedagogía, Subdirector Administrativo, además de 1981 a 1987, fue Director Emérito de la ENSN, por reconocimiento de facto de la comunidad normalista.

Forma parte del grupo más selecto de pedagogos del Estado de Nayarit. Destacó como líder sindical que se ganó el cariño y el reconocimiento de sus compañeros maestros por su gran espíritu de servicio. Como catedrático dejó constancia de su gran preparación pedagógica y cultural. Sobresalió como gran organizador de la función administrativa. En la ENSN, se distinguió como genuino maestro de maestros y como imbatible defensor de su institucionalidad.

Luchó contra el cacicazgo político impuesto por Gilberto Flores Muñoz. Participó en acciones sindicales que dieron origen al SNTE. Destacó como miembro de Acción Revolucionaria Sindical del SNTE. Organizó la defensa de la ENSN en contra del intervencionismo de funcionarios del Gobierno del Estado.

Lo conocí como dirigente sindical magisterial, como tal, ocupó todas las secretarías con excepción de la Secretaría General. Fue mi influencia de ingreso al magisterio federal y seguí recurriendo a él, como apoyo profesional, como amigo, como maestro y compañero de influencia moral. Mi relación directa con él Profesor Chava se extendió, desde que el 01-04-1961 me dieron mi nombramiento como Profesor Rural, hasta que falleció en 1989.


Se le quería tanto y por tantos, que cariñosamente todos le llamaban “chavita”. Hasta reandar lo andado, Maestro.

LA PRESA, NAYARIT


Enrique Avalos Hernández.


Segundo Semestre de 1968-1969. Lo que me había llevado a la “Airosa del Sur” había concluido, por lo tanto, tenía que regresar a la décima zona escolar con cabecera en Santiago Ixcuintla. El Profesor Salvador Langarica Cabrera quien había sustituido al Profesor Cobos en la Inspección Escolar, me dio todas las facilidades y me adscribió en la Escuela Primaria Federal “Presidente Cárdenas” de la comunidad de la Presa, municipio de Santiago Ixcuintla. Enrique Avalos Hernández era el Director, había sido mi condiscípulo en la primaria y la secundaria y con el resto de las amigas del personal, se encargó de que mi reincorporación fuera feliz y de enseñarme los secretos legales e ilegales de las peleas de gallos, a los que mi tocayo era muy aficionado.

La Presa, era una comunidad conurbana de la cabecera municipal, lo que me daba la oportunidad de recrearme entre los emblemas santiaguenses de origen que son parte de mi esencia, tales como: El Cerro de La Cruz, el Río de Santiago, el Templo de La Ascensión, la Feria de Primavera, mis escuelas la EMO y la Secundaria No. 1, los amigos que están y los que se han ido, así como, los barrios de mi reandar posmorten. En cualquier esquina o recoveco, de La Presa o de Santiago, borbotean recuerdos con proyección etérea de infancia y adolescencia.

El segundo semestre, siempre se siente más rápido que el primero, creo, que es porque el primero transcurre entre meses de pocas suspensiones, que estamos más cerca del principio que del final y le precede un periodo vacacional de dos semanas, mientras que el segundo semestre, transcurre entre meses con más festividades, que se sienten los aires de vacaciones y le precede un receso escolar de seis semanas, esta sensación todavía es mas notable en una región tan rica como la de Santiago Ixcuintla, donde se tiene que ser partícipe de las fiestas religiosas, de fundaciones de ejido y las de Primavera, del Elote, del Tabaco y otras, que se organizan por todas las comunidades, para que se compartan entre todos, los beneficios económicos que los campesinos “cultivan y cosechan”.


El segundo semestre paso raudo y veloz, entre compañeros nobles y sinceros, lo ideal hubiera sido prolongar mi permanencia entre ellos, pero ya me gusta la “mala vida” en sentido figurado y era necesario regresar a donde se aletarga el río Grande o de Santiago y así sucedió, como me cantara a mi retorno la magnífica Profesora Laura Vega Bernal: “ya vine de donde andaba, se me concedió volver, a mi se me "afiguraba", que no lo volvería a ver”.

IXTLAN DE LOS VIENTOS.



Halcón Desafiante de Tornados.

Al mediodía 7 de marzo/2000, estuve a despedir los restos mortales del compañero y amigo Alejandro Castillón Valencia, también conocido, en alusión a sus verdes ojos como “El Gato Castillón”.

Mermado de sus facultades físicas y bajo la protección de su familia, vivía retirado del servicio educativo. De corte guevariano, solo un imponderable como la muerte podía doblegarlo.

Egresado de la Escuela Normal Urbana, donde fue un destacado líder estudiantil, se dedicó al desempeño de su magisterio, como un ameritado docente desde el banquillo de la escuela primaria, hasta ocupar, la cátedra en las instituciones formadoras de docentes. Dejó constancia de su pedagogía en la Escuela Normal Superior de Nayarit. Como educador fue relevante en el análisis, la crítica y la pedagogía de vanguardia. En sus últimos años activos, fue Director del CBTI de Ixtlán del Río y de las Escuelas Normales Experimentales de Atequiza y de Ciudad Guzmán.

En la confrontación política y el debate ideológico, como líder sindical, su discurso fue temido, inflexible y contundente. Por su participación en múltiples controversias, en la ENSN se le calificó como “Ave de Tempestades”, como ex Director de la ENSN, en honor a la verdad y en gratitud por su colaboración, diría que mas bien fue un “Halcón Desafiante de Tornados”.

Como luchador sindical jamás pidió cuartel ni nadie pudo darse el lujo de humillarlo. Siempre fue un digno oponente del cacicazgo de la Sección 20 del SNTE, a quien desafió con desdén, tan solo por tal osadía, se le debió permitir regresar a morir a su trinchera de origen, pero, “el látigo del cacicazgo trazó en el aire su rúbrica”.Alejandro supo hacer amigos, los que así nos consideramos, supimos de su generosidad y nobleza. Algunos conservamos su amistad, cómo y cuánto, hasta que él quiso. De los que no la conservaron, siempre comprendió sus razones para ello. Al final todos lamentamos su pérdida.

Alejandro: “Hasta reandar lo andado”.

Maestro. Enrique Figueroa Romero. Director de la Unidad 181 UPN

IXTLAN DEL RIO, NAYARIT.


Primaria Federal "Narciso Mendoza"


Primer semestre de 1968-1969. Las circunstancias políticas, que a la postre culminarían con el desenlace del liderazgo del Profesor Federico González Gallo en la Sección 20 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, hicieron que junto con el “Gato” Alejandro Castillón Valencia fuera adscrito a la Escuela Primaria Federal “Narciso Mendoza” de Ixtlán del Río, ciudad conservadora y costumbrista en los límites de Nayarit y Jalisco, la cual, hasta la fecha mantiene para quienes gustan de la gastronomía tradicional, la Birria de chivo, los antojitos mexicanos a la plaza, los taquitos sudados, la nieve de garrafa y los dulces regionales de “Don Daniel”.

Mi estancia fue breve, tan solo un emotivo semestre que fue completo en lo profesional y en lo personal, con un gran amigo como Alejandro, y las relaciones afectivas con los compañeros Lupe López, Irma, Betty Socorro Primitiva y otros que se fugan de mis recuerdos. Mención especial me merece la Profesora Maura Mendoza, fina Directora, que con su bondad, amabilidad y comprensión estimulaba toda la capacidad docente y social de su escuela, además, alentaba el fortalecimiento de las relaciones humanas entre su personal. La Profesora Maura, no obstante su menudita imagen y su moderada presencia, cubría con una amplitud inusual para el medio, todo el espacio de su ámbito escolar.

La “Narciso Mendoza” era el plantel de la ciudad de más reciente fundación, como sucede en estos casos, su demanda era muy limitada por su ignota presencia y porque, los padres de familia llevan a sus hijos a las escuelas de costumbre. La escuela de la Profesora Maura, marchaba a contrapelo, la opinión del pueblo no le era favorable, de ahí, el extra que había que realizar para levantar sus bonos, ese semestre, como no había sucedido desde su fundación, se hicieron actividades escolares y de difusión, deportivas con el alumnado y los jóvenes de la ciudad y eventos sociales. En ese semestre, se sintió la presencia de la escuela de reciente creación como una “escuela de calidad” y la figura pequeñita de la Directora Maura sostenida por su personal, se alzó por encima de sus homólogas de las escuelas de mayor tradición y antigüedad.

Por más de cuarenta años, Ixtlán del Río es motivo personal de evocación sentimental, de paso a Guadalajara, de visita cuando el gusto me lleva a la birria de chivo o a la nieve de garrafa y de reflexión “año con año” cuando me refugio en la apacibilidad del airoso “Cerro de Cristo Rey”.

AMAPA, NAYARIT.


Maestro Mario Aguilera Dorantes.


1966-1968. En el cometido de la función magisterial se presentan circunstancias determinadas por el ambiente en que se ha de desempeñar la docencia o la administración, este ejercicio educativo asume diversas maneras de aceptación o de recusación entre los actores que en él intervienen, por ello, un directivo puede ser un triunfador o un derrotado en una institución educativa, de acuerdo a como lo juzguen padres de familia, alumnado, compañeros docentes y autoridades. En la etapa que evoco, el éxito trascendente venía acompañado del aplauso de todos y el fracaso se derivaba de la protesta de padres de familia respaldados por parte del personal que no armonizaban con el desafortunado director. Por lo anterior, hay padres de familia buenos o malos, escuelas benignas o infames, comunidades que gratifican o que castigan, por lo que puede decirse, que como se den los logros un directivo puede ser Napoleón o Wellintong. Con condiciones sociales mejores que en las comunidades donde había trabajado y una organización en la que el educador dependía totalmente de la influencia de los padres de familia, la comunidad de Amapa fue mí Waterloo como para el Emperador Francés y no quise obcecarme en “sacarme la espina” un periodo escolar posterior, porque reconociendo fallas en mi desempeño, opté por darle la oportunidad a mi compadre Rodrigo que entrara a mi rescate como director y yo aboné mis méritos como docente. Como profesor todas las opiniones me favorecen en todos los niveles de la enseñanza, pero como directivo, Amapa fue la experiencia que me habilitó para que nunca jamás (38 años) como Directivo viviera la amargura de la Batalla de Waterloo y vaya que tuve mis oportunidades, en primarias de nuevo Villa Juárez, en secundarias, Tecuala, Santiago Ixcuintla y Ciudad del Valle, en instituciones formadoras de docentes, la Escuela Normal Superior de Nayarit y la Unidad 181 de la Universidad Pedagógica Nacional y en labores de supervisión, la Jefatura de Enseñanza y la Inspección Escolar de Escuelas Secundarias.

Justicia a secas, recordar a Francisco Escobedo, campesino de Amapa y conocido en toda la región costeña, por ser de las personas que se les conocía por “ricos”, por trabajar sesenta hectáreas o más, tener dos tractores, camioneta propia, camión y algunas vaquitas para la leche de la familia y los quesos de los profesores. Su respeto se incrementaba por ser el juez auxiliar del pueblo y portar siempre una super 38 con cachas niqueladas, así mismo, fomentaba su popularidad el gusto de “jalar la tambora” cuando cosechaba, su esplendidez al compartir con los amigos y el procrear 15 hijos. Los profesores sabíamos aprovechar la generosidad de “Pancho Escobedo”, no había problema que no nos resolviera, pero decía “profes cabrones, pero primero búsquenle y si no encuentran, ya saben, yo los desatoro” y disponíamos de los bienes como propios. Los profesores le teníamos un gran cariño por la protección y otras atenciones que nos proporcionaba, con curiosidad en cierta ocasión le pregunté el porqué era “tan blandito” tratándose de la escuela, y me contestó con mucha firmeza: “se te hacen pocos 15 hijos que me educan y así, garantizo buen trato y que me cumplan”. Como él, en Amapa y en todas las comunidades había los mecenas ejidales de la educación, por eso, cuando alguno de sus hijos o nietos se nos acercaban a solicitar un servicio personal, anteponían como un “ábrete sésamo”: ¡me manda Pancho Escobedo!.

Amapa era una comunidad de privilegio, no solamente por su cercanía con la cabecera municipal, sino porque, en su escuela primaria “José María Morelos Y Pavón”, se ubicaban los profesores más ameritados de la Histórica 10ª. Zona Escolar, era un personal selecto por su cumplimiento y eficiencia, la exigencia comunal sobre las autoridades educativas era determinante para que así fuera. Influenciados por el Ensayo Piloto, la comunidad, los padres de familia y las autoridades, se encargaban de cumplir con las exigencias que el servicio educativo requería y que a ellos les correspondía. Los vecinos otorgaban muchos afectos a los profesores y profesoras, estos correspondían con entrega total para que aquellos se sintieran satisfechos. Muchos buenos y muy buenos educandos pasaron por sus aulas, entre otros: Eloy Ocegueda y su esposa Esperanza Robles, Enrique Félix y Luisa su Esposa, Pablo Santillán, Amado Castillón, Everardo García, los hermanos Francisco y Sabel Carrillo, Alicia Luján, Epifanía Inda, y con mis compadres Rodrigo y Susana se rompe el encanto, posteriormente ya no fueron tan selectivos.

Amapa fue una de las comunidades beneficiadas por la actividad bienhechora que desplegó en el Municipio de Santiago Ixcuintla, el Ensayo Piloto de Educación Básica de la SEP (1948-1958), este proyecto histórico de la Educación Rural en México, se llevó a cabo con sostenimiento mixto y dentro del marco de los ideales universales de paz, democracia y justicia social que propugna la UNESCO. Hasta la fecha es del dominio popular, los beneficios que recibió la comunidad en lo social, lo educativo, lo político y lo productivo y sobre todo, la relación personal que tuvieron con personajes míticos de la educación como: Mario Aguilera Dorantes, Severiano Ocegueda Peña, Ernesto Flores Cobos y otros. Amapa y el Valle de Santiago Ixcuintla, quedaron marcados para siempre en su vida, su historia y sus costumbres por el Ensayo Piloto de Educación Básica,

Plática de “Don” Mario Aguilera Dorantes con los campesinos de una comunidad del Valle de Santiago Ixcuintla:

"Nuestro plan es tan sencillo como una agenda de familia. Examinamos lo sucedido en los últimos años; cuáles fueron los ingresos, cuáles los gastos; qué nos propusimos hacer, qué es lo que no logramos, y hasta qué punto hemos mejorado. Examinamos nuestra situación actual y lo que puede ocurrir en los años próximos. Dónde nos hallamos y dónde quisiéramos estar dentro de tres, cinco o más años. Un padre de familia pensará en enviar a su hijo a la secundaria al terminar su primaria; otro se propondrá construir con ladrillo su casa; reflexiona sobre lo que debe hacer durante dos o tres años para que eso sea posible; ya tiene una perspectiva: después, con esta idea aproximada, determina lo que debe hacer el presente año, el mes entrante, mañana mismo; toma decisiones día por día. Lo mismo hacemos al formular un plan. Examinamos el pasado, el presente, el futuro más o menos próximo. Nos trazamos Ios medios en vista de las metas a donde queremos llegar en un plazo convenido. Cuál será su duración... la sabiduría china reconocía, como los modernos planificadores, que cada cosa tiene su plazo, que no es una opción entre cosas contrapuestas: todas ellas forman un conjunto armónico. Tres siglos antes de la era cristiana Kuang Tzu escribió: "Si haces proyectos para un año, siembra trigo. Si haces proyectos para un decenio, planta árboles. Si haces proyectos para toda una vida, enseña y educa a los hombres." Esto que hacemos en la vida cotidiana, es lo que hacemos en forma semejante al preparar un plan o un programa."

Para hacerse sentir por los campesinos y por los hombres y las mujeres, así era “Don Mario”, a la altura de sus interlocutores, con la modestia de un directivo de escuela rural, con la humildad de un profesor pueblerino, con la praxis del que predica con el ejemplo, con la confianza que inspira hablar con la verdad y con el realismo del que “sabe que sabe”.