Camino permanentemente. Juego billar y dominó por horas. Conservo el gusto por la lectura. Veo buenas o malas películas con las que me identifico. Mantengo una sana distancia con mis hijos pero los quiero y los conservo en mi mente. Aprendo a gozar mi jubilación. Espero el día en que la verdad saldrá de la tierra, y la justicia brotará desde los cielos.